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 Presencia de Arco: La evolución de la morfología del pie

del niño y la bóveda plantar cambia a medida que el niño

crece.

Debe tenerse en cuenta que la bóveda plantar (conjunto

arquitectónico que forman los elementos óseos y

ligamentosos del pie) no alcanza su morfología normal

hasta los cuatro años de edad, por lo que la inclusión de un

soporte en el arco debe ir precedida de prescripción

médica. Es desaconsejable la inclusión de elementos de

origen ortopédico, especialmente soporte de arco.

Quebrante de Puntera: el quebrante de la puntera cumple

dos misiones, por un lado, ayuda al movimiento de

despegue del pie durante la marcha y, por otro, disminuye

el riesgo de caídas del niño a causa de tropiezos. Se

recomienda la presencia del quebrante y, si es posible, que

durante las primeras etapas de marcha el ángulo de

quebrante de la puntera se eleve del suelo como mínimo

de 12º a 14º.

Taco: se desaconseja el uso de taco, sin embargo en

algunos diseños donde existe, deberá proporcionar

estabilidad siendo la zona de apoyo igual o mayor que la

zona de apoyo del talón.

RECOMENDACIONES EN EL CALZADO INFANTIL:

Arco: No debe tener

Quebrante de puntera: Debe tener

Taco: No debe tener